El camino de la perfección

Restaurante Sant Pau

Carrer Nou, 10

08935 Sant Pol de Mar (Barcelona)

www.ruscalleda.com

Siguiendo la costumbre de celebrar los cumpleaños de Rocío en restaurantes de la parte de arriba de la tabla, estuvimos anoche en Sant Pau, donde Carme Ruscalleda y su equipo persiguen la perfección con denuedo y también con mucho "seny".

Creo que lo más significativo del menú degustación que cenamos, es la poca ostentación de la mucha técnica que esconde la realización de los platos, el Mondrián de pimientos, brandada de bacalao y olivas negras tiene bastante más técnica que la que deja ver.

Otra cosa muy especial es el cuidado en la presentación, aunque esto es normal en este tipo de restaurantes, en Sant Pau se nota un especial cuidado en el aspecto estético del plato siendo muy, muy detallistas, como si la consigna fuera una búsqueda de la perfección a la que se aproximan ciertamente. Como ejemplo el Ravioli de verduritas que parecía sacado de alguna fotografía de alta resolución.

Muy conseguido el plato de quesos, aunque algún tragaldabas seguro que se queja de la cantidad....sorprendente el queso Payoyo de Cádiz.

Mejorable?, algunas lagunas en el servicio, algunas lagunas en el sommelier, como si la propietaria y cocinera no otorgara la misma importancia a la sala que a la cocina.

Tan cerca, tan lejos

Acabamos de regresar de Estambul, un destino típico que se nos ha resistido un montón de años, ya sabéis, no está muy lejos, es fácil ir....lo vas dejando...

Bueno, al final nos animamos y hemos pasado una semanita en la antigua Constantinopla, y aquí es donde entra en juego el título de este post....nos ha dado la sensación de estar, a veces en cualquier ciudad española del sur (digo por el clima, no por otra cosa...), y a veces en cualquier ciudad magrebí como Casablanca o Túnez.

Hemos disfrutado de uno de los mejores skylines del mundo, hemos caminado por la Istiklal Caddesi, hemos tomado té turco en Pierre Lotti, nos hemos peleado con los camareros de los restaurantes bajo el puente Gálata, nos hemos subido a autobuses sin saber muy bien donde nos dirigíamos, hemos comido bocatas de verdel y hemos hecho en fin, todo lo que se espera de un "guiri" en Estambul

Para variar

Bembi
Consell de Cent, 377
08009 Barcelona

Hacía muchos años que no me atrevía con la comida india, había tenido alguna mala experiencia en restaurantes indios en Londres y no me apetecía repetir noches de insoportable ardor de estómago, a pesar de todo y dadas las últimas experiencias, nos decidimos a darles una oportunidad.
El local es correcto, minimalista (que es la forma de decir que no hay ni cuadros) y el servicio muy atento y simpático, esto al menos es lo que nos sucedió a nosotros, lo mismo cuando vayais se convierten en unos bordes....
Las vieiras a la plancha no valían mucho a pesar de una trabajada salsa de azafrán, pero el mihojas de galleta con garbanzos y salsa de yogur....estaba tremendo!!, quizá un poco difícil de comer, pero los sabores de las especias y el yogur...no os lo perdais.
Los curries estaban fuertes, muy especiados (como tiene que ser) y picantes (como tiene que ser), pero sorpresivamente el de queso tenía mucho más aroma que el de gambas y definitivamente era el mejor; eche de menos un poco de arroz bashmati en vez del arroz al azafran que nos sirvieron.
Y una última, y esta vez mala, opinión, no es de recibo que en un restaurante indio te sirvan té de bolsita....se supone que estabamos en un trozo del país que inventó en té negro, un poco de cariño en estos detalles no hace mal a nadie.

Para ver y ser visto

nuba
Dr.Fleming, 12-14 BARCELONA
www.nubabcn.com
Como empezar?, bueno, voy a intentarlo por el principio. La recepcionista la típica tía seca, borde y poco comunicativa, es decir, lo normal. La mesa, llevada a su mínima expresión, tengo un par de amigos que literalmente no podrían comer en tan reducido espacio. Comienza a llover y nosotros con la mesa en la terraza. Un camarero amabilísimo (rara avis) nos recoloca en el interior y se gana una bronca de "chaqueta negra", un tipo al que parece que el hecho de que un cliente se moje le importa un pimiento. La mesa sigue siendo igual de pequeña, con el agravante de que la mesa de al lado está tan cerca que el camarero sólo consigue pasar de costado.
Ocho trocitos de alcachofa frita en láminas fué el pica-pica mientras esperabamos nuestra comanda, ocho, ni uno más ni uno menos, y con alguna de las láminas podríamos haber recubierto el Guggenheim dada su dureza similar al titanio. Llegan los primeros, una tempura de langostinos absolutamente infumable, blanda, fría, una chapuza total; cuatro minirrollitos orientales con tofu y no sé que más, para mí que estaban comprados en alguna tienda de congelados, la Sirena o 7 Mares, lo que no estaban es al nivel de su precio en carta ni por asomo.
Aparecen los segundos, unos salmonetes del Pleistoceno superior y eso que estaban entre las recomendaciones del Chef (??), pero qué es esto?, la sensación de timo comienza a ser muy importante; el steak tartare no era para tirar cohetes, simplemente cumplía aunque los he comido mejores en restaurantes con menos ínfulas.
El camarero amable se percata de la situación y nos cambia los salmonetes por un "tataki de atún", que en realidad era un trozo (pequeño) de atún a la plancha con un poco de sésamo por encima. ESO NO ES UN TATAKI http://es.wikipedia.org/wiki/Tataki
Para no aburriros, se ven famosos y famosillos, las copas son un atraco y el restaurante otro atraco, es decir es el típico sitio para ir a que te vean y a ser visto, a comer y a beber ni se os ocurra.
PD: Y muchas gracias al camarero amable, si no llega a ser por el hubiera sido todo aún más desastre

Cenas en casa (1)

Como todavía hay incrédulos que piensan que mis habilidades culinarias se limitan a la apertura de latas de conserva os adjunto algunos de los platos preparados "con estas manitas y mis abalorios" el pasado fin de semana.

* Calamar a la plancha con aceite de "harissa" y picada de ajo y perejil

* Tartar de atún rojo con aguacate



* Risotto con pesto casero


* Ceviche de lubina, langostinos y calamar

Haciendo el guiri en Lisboa

Solar dos presuntos
Lisboa
www.solardospresuntos.com

A veces no queda más remedio que someterse a los dictados de otros, superiores, clientes, familiares, etc...sólo bajo esta premisa puede entenderse que cenara la semana pasada en este restaurante del centro histórico de Lisboa cerca de la plaza del Rossio, y no es que cenara mal, no...pero de puro antiguo aburre. Como siempre en Portugal las raciones gigantescas, pero las preparaciones aburidas, vistas una y mil veces, tendría que estas penado el uso de las patatas cocidas como guarnición...debe ser la primera guarnición de la Historia, con bastante probabilidad Jerjes I comía patatas cocidas de guarnición entre sus asaltos al Peloponeso.
La mayor parte de la clientela era extranjera, había italianos, franceses, otros españoles y un par de furcias de nacionalidad desconocida que acompañaban al ya clásico personaje con raya baja y que pasa la melena al otro lado de la cabeza para tapar la calva.
Lo mejor de la cena?, un maravilloso queso de "Serra Estrela" que pusieron como entrante, lo peor?, la sensación de estar haciendo el guiri, sólo faltó una invitación para ir a escuchar fados...

Un clásico

La Brigada
San Telmo - Buenos Aires
www.labrigada.com

Que comer buena carne en Argentina es fácil, no es un secreto para casi nadie, que la hagan al gusto de uno es más difícil, y en La Brigada (C/Estados Unidos, 465) por fin hay un parrillero argentino que escucha al cliente y saca la carne al punto deseado. No pidais maravillas, no pidais cocina fusión ni deconstrucciones ni presentaciones modernas, simplemente carne....
Excelente el punto de las mollejas, normalmente o secas o grasientas, en La Brigada el punto fué perfecto, sin objeciones, mejorable la empanada y gloriosa la entraña, aunque he de decir que ultimamente percibo la carne argentina un poco más dura de lo normal, recién matada?, empiezan a abusar del pienso en detrimento del pasto?.
Para aquellos que tengais en mente un viaje al país del tango, os sugiero terminar vuestro paseo por San Telmo en La Brigada, y reservad, que es pequeño y se pone a tope...

Algo más que parrillas

Crizia
Palermo Soho - Buenos Aires
www.crizia.com.ar

Son ya muchos años viajando a Buenos Aires, unas veces por trabajo y otras por vacaciones la ciudad de la Boca, de San Telmo, de Recoleta y de otros tantos sitios entrañables, ha atraído mis pasos una vez más. La semana pasada cené con un buen amigo en Crizia, en la calle Gorriti en el corazón de Palermo Soho, y debo decir que fué una excelente cena, el entorno fantástico con reminiscencias de los locales tipo "loft" de Nueva York, techos altos, ambiente de almacén, como dirían los tertulianos televisivos "arreglao pero informal".
Me sorprendió el trato que le dieron al pescado, tras un par de días de dieta carnívora, me tiré como un loco al atún rojo con vinagreta de lima para encontrar un punto perfecto de parrilla y un aliño a la vez sencillo y complejo, un toque sutil de cilantro que combinaba con el punto ácido de la vinagreta, si no fuera por los ya insufribles trigueros en la guarnición....ah!!, se me olvidaba, mejor con sal gorda o con Maldon.
Bueno, ahí lo teneis, que no sólo de bifes, matahambres, vacíos y asados de tira vive el hombre, ni siquiera el argentino....

Resistiendo

MEDITERRANEO
El Grao - Castellón

Hace unos años en el Grao de Castellón había varios restaurantes muy recomendables basados en productos de la mar, recetas sencillas y de toda la vida, buena atención y precios razonables, Falomir, Rafael....pero ultimamente por unas razones o por otras, cambios de dueño, crisis económica o lo que fuera, dejaron de ser lo que fueron y algunos incluso cerraron sus puertas.
Mediterraneo sigue ahí, y las razones de su continuidad, además de su caracter familiar donde todos reman, son evidentes tras probar los calamarcitos con ajos tiernos y habitas, el plato de cáscara...(los mejillones bajaban un poquito la media) o el suculento arroz meloso con pulpo y gallineta, como nos dejamos aconsejar por el maître no puedo hablar en profundidad de la carta, pero apuntaba variedad de arroces y pescados. Aunque solo sea por eliminación si vuestro devenir nos lleva hasta Castellón, una visita a Mediterráneo es casi, casi obligada.

Con buen producto...

Los Templarios
Avda.Valencia (ZARAGOZA)

Si miras mucho la entrada no entras....es muy fea...sobreponiendonos al impacto visual al final nos asentamos en un restaurante de rollito medieval, armas en las paredes, armaduras, vamos la parafernalia típica.
La carta cortita, casi había más vinos que platos, y desde luego la alta cocina, la cocina-fusión o la microconina no son los fuertes de Los Templarios, pero amigo....el género....impecable!!!, tablita de ibéricos bastante generosa (lo mejor el morcón), cecina escandalosamente en su punto, morcilla de arroz muy bien frita (demasiado especiada quizá?) y un par de chuletas bien veteadas de grasa para hacer a la piedra.
A mí no me gusta la carne "a la piedra". Los primeros trozos se hacen correctamente, pero en cuanto la piedra pierde temperatura, la carne se cuece miserablemente, Los Templarios ofrecen la solución más simple, cambian la piedra muy frecuentemente, de forma que siempre mantiene el punto adecuado para poder "cerrar" la carne. Casi, casi de notable.
Tomamos un Somontano suavecito "Cojón de gato" y el personal (amabilísimo) nos invitó a unos orujitos, sana costumbre esta pero en vías de extinción.
Lo dicho, material de primera, pocas complicaciones y otra alternativa para una cena en Zaragoza.

Sorpresa, sorpresa

Milmaneras
Avda.Manoteras (MADRID)

La primera vez que fuí a este restaurante, en Avda.Manoteras de Madrid, exactamente frente a Iberdrola, ya me quedó la cosilla de escribir una entrada en este blog, volví hace unos días por allí y de hoy no pasa....
Es un sitio raro, en la planta baja hay menú del día y una barra con pinchos (odio lo de "pintxos"), en la planta superior hay un restaurante pequeñito con cinco mesas, correcto, sin lujos. Nos decidimos por una menú degustación en pequeñas raciones, risotto con pesto (distinto), brocheta de mozarella, pimientos asados y anchoas (un clásico con otra presentación), bacalao confitado (el punto perfecto, quizá un poco salado para mí), rabo de buey estofado (por buscar algo, demasiado dulce, probablemente exceso de Pedro Ximenez), garbanzos con pulpo (b.u.e.n.i.s.i.m.o.s), resumiendo, ni por un momento puedes pensar que en un restaurante de polígono, por más que sea un polígono "pijo", pudieras encontrar un sitio para comer tranquilamente a muy, muy buen nivel.
Buena selección de vinos, buen servicio (a veces demasiado locuaz...) y un precio razonable, una pena que por razones obvias, no abra de noche.

Donde vais?, o como decía el latino, Quo Vadis?

Big Fish
el Born - Barcelona

Donde vais?, que sois?, me gustaría tener respuesta a estas preguntas, si sois una parrilla de pescados, a que santo viene el sushi?; si sois una barra sushi, no entiendo el entorno; es fusión?, no lo creo, tanto el sushi como la parrilla tienen líneas muy definidas sin cruces.
Mientras busco las respuestas, os diremos que la cena fué de más a menos, el tartar de atún y aguacate fuera de lo tradicional, quizá demasiado especiado, constituyó lo mejor de la cena, pedimos también unos salmonetes a la plancha con un crujiente de pistachos, dos cosas, la primera es comprarse unas buenas pinzas para desespinar, la segunda es comprobar que el sabor del pistacho frito oculta el sabor del salmonete, aún con todo, aprobado.
Siguieron unos makis atemperados (o sea fritos) con el arroz excesivamente pasado, buena textura pero poco sabor y también pedimos ikura (huevas de salmón), saladas, no muy bien presentadas y demencialmente caras, no piqueis...
Tampoco pidais udon con no me acuerdo que...y prefiero no acordarme, creo que era salsa soba, no es más que una vía para aprovechar los recortes del pescado, en serio, aunque seais adictos al udon, no lo pidais.
Un helado de cafe correcto, aunque echamos de menos un platito para poner la cucharilla, ya sabeis cosas de viejos...y una mención para el vino, Belondrade y Lurton - Verdejo 2007, excelente como siempre y a un precio bastante razonable (mucho mejor que el del ikura).
Bueno, pues eso...donde vais?

Elogio de la simplicidad

Casa da Boa Gente (O malcriado)
Matosinhos - Porto (Portugal)

A veces te encuentras restaurantes como a Casa da Boa Gente o como se le conoce en Matosinhos "O Malcriado", simple hasta el extremo, el pescado en la calle, la parrilla y el parrillero en la calle, todo a la vista, nada de luces indirectas, nada de vajillas de diseño, nada de camareros fashion, nada de larguísimas cartas, nada de "pescado al estilo de mi abuela Josefina", simple, directo, auténtico.
Salvo por el detalle del precio del Pez de San Pedro, 40€ es una fortuna y más en Portugal, y porque al pedir algo para mantener frío el vinho verde (Muralhas de Monçao) me miraron como las vacas al tren, disfruté como un cochino en un maizal.
Me sentí como en Getaria hace ya unos cuantos años antes de que confundieran el camino y se dedicaran a exprimir al cliente cual limón murciano, y cualquier parrillero de medio pelo se pensara que estaba al mismo nivel que un primer espada de la gastronomía guipuzcoana.

Pero volvamos al Malcriado, pedí Pargo a la parrilla, el punto perfecto, el material de primera, buen aceite, buena sal....hay momentos en que el cuerpo te pide imperiosamente su ración de simplicidad extrema.
No aceptan tarjetas, da igual, hace cuanto que no cenais por 19 €?

Cenas temáticas (I)

Cenas con queso

Se trata de preparar un menú de cena con al menos cuatro platos todos ellos tomando como ingrediente principal algún tipo de queso. Creo que tuvimos bastante éxito aunque nunca llueve a gusto de todos....

1. Machas con parmesano. la primera vez que estuve en Chile y me ofrecieron almejas rosadas (machas) con parmesano gratinado pense que estaban locos,¿como iba a combinar el sabor de una almeja con un queso fuerte como el parmesano?, lo cierto es que combinan bien y además el sabor de la almeja se incrementa. Como en España es imposible obtener machas frescas las sustituimos por machas de lata a las que pasamos brevemente por agua helada, las montamos sobre cucharas de loza y a gratinar. El último toque antes de servir lo dimos con el soplete.
2. Rulo de cabra gratinado sobre cama de cebolla caramelizada. la mezcla del sabor ácido del queso de cabra y el dulce de la cebolla caramelizada fué una grata sorpresa. Para caramelizar la cebolla uso azucar moreno que ayuda a conseguir el tono marrón necesario, se puede tener montado con bastante antelación.
3. Camembert frito con mermelada de arándanos. Mejor si el camembert no está muy maduro, pasarlo por huevo y pan rallado y a freir en abundante aceite caliente, cuidado con el tiempo o se abrirá... Logicamente es mejor comprar el camembert en porciones que andar cortándolo con el cuchillo
4. Canalón de berenjenas con requesón. Un poco más complicado, ya que inmediatamente después de freir la berenjena, pasada por harina, debemos darle forma de canalón con la ayuda de algo cilíndrico, yo uso un tarro vacío de anchoas, una vez secas y crujientes se rellenan con requesón

Y eso fué todo...de los postres se ocupan otros, aunque tengo como reto para este 2010 empezar a meterme en territorio dulce...

Tasca FM - Granada

Bar FM - Granada
Carretera de Jaén, 54

Animado por una amigo granadino, por la proximidad al hotel y por los 2ºC que bajaban directamente de Sierra Nevada, me encaminé al bar, tasca, garito?, llamado FM y al que otros, luego supe la razón, denominan "el púas".
Local pequeñito para picar en la barra, mostrador de inox, taburetes, pizarra y el resto de adminículos que no deben faltar en una tasca que se precie.
Pedí pulpo seco, bastante correoso por cierto, cabezada de pulpo, es decir la cabeza del pulpo, cocida y cortada a rodajas muy finas, tortitas de camarón fritas, berenjenas y salmonetes, todo en medias raciones. He de decir que los fritos estaban excelentes, ni una gota de aceite sobrante, crujientes y nada aceitosos, podían haber sido más generosos en la cantidad de camarón por cada tortita, podían haber puesto un poquito de sal en la berenjena y podían haber limpiado un poco mejor los salmonetes, pero considerando que la calidad estaba bastante bien y no deja de ser una tasca...pues eso, una muy buena tasca, con muy buena materia prima y excelente manipulación de los fritos

Dos Palillos (Barcelona)

Curioso restaurante este, curioso el nombre ya que a pesar de ser un restaurante japonés, los palillos a los que se refiere el nombre son los clasicos palillos planos que había en las tascas antes de la llegada de esos palillos con muesca, redonditos y fashion que tienen ahora quienes gustan de escarbarse los dientes despues de comer. Curiosa la localización, en la C/Elisabets, continuación de la C/Tallers en la entrada del Raval barcelonés y al lado del Hotel Camper (si, si , los zapatos...), muy cerca del Museo de Arte Moderno. Curiosa la decoración, recordando a las tascas típicas del barrio antes de que llegaran los locales de diseño y los lavabos donde no sabes si sentarte, acostarte, mear o pedir una cerveza. Y curiosa la cocina, que probamos en la barra, al estilo antiguo, la ostra en sake caliente, sorprendente; el sashimi de gambas al vapor de te, muy sorprendente; la ensalada de algas con cañaillas, mejillones y berberechos, bueniiiisima, el wok de calamar con verduritas y cilantro, magnifico, especialmente por el toque del cilantro.
No tan curioso el plumazo que nos sacudieron al pedir el vino por copas, la oferta era escasa y no muy sugerente, en blancos había un Sauvignon Blanc chileno bastante mejorable y un Chardonnay navarro con tendencia a dejarte un bonito dolor de cabeza, en ambos casos no más de 5 € la botella en origen, si están pagando más tengo una torre toda de hierro en París que se la puedo dejar a muy buen precio.
Conclusión: Divertido, sorprendente, para ir pocas veces y nunca, nunca pedir el vino por copas

Mugaritz (Rentería)
Cerrando los ojos dado el precio del restaurante en cuestión nos decidimos a celebrar el cumpleaños de Rocío en Mugaritz, el restaurante de Andoni Aduriz (2 estrellas Michelin), al ser un menú degustación de 11 platos tuvimos que informar de las peculiaridades alimenticias de mi mujer, es decir nada de carne, ni pollo, ni conejo, ni caldos cortos, ni confitados en grasa animal...
Lo cierto es que partiendo de la premisa de que a estos sitios no se viene a comer sino a exponer al paladar a sopresas constantes, Mugaritz fué una maravillosa sorpresa, desde las piedras comestibles, al carpaccio de sandía o al consomé de pescado azul, fuimos sometidos a una experiencia gustativa maravillosa, en ocasiones tan sutil que costaba apreciar un matiz de un sabor o una textura tenue.
También hubo momentos menos buenos, el servicio de sala necesita algun repaso, el pan no se sirve en "cachos", ni en "pedazos" como nos preguntó la camarera, y si el sumiller considera que el vino está demasiado frío y conviene cambiar el agua, quizá fuera necesario preguntar al cliente si lo aprueba, ya que podría gustarle el vino muy, muy frío.
Los postres flojitos, en nuestra opinión, demasiado helado y de gustos muy similares, asimismo recomendar un vino para los postres debería ser una obligación en este tipo de restaurantes.
A pesar de todo fué ESPECTACULAR